Tres consejos sobre cómo (no) recuperar datos

En la era tecnológica en la que vivimos, contamos con diferentes dispositivos de almacenamiento de información y, pese a lo revolucionaria de su composición, no están libres de ser afectados por diversos factores tanto a nivel de hardware como de software y, por consiguiente, puede producirse la pérdida de datos.

En DNP Corp siempre recomendamos evaluar la situación como se merece antes de decidir qué hacer, porque dependiendo de ello, puede llegar a perder el 100% de los datos almacenados. En el laboratorio, hemos sido testigos de muchas situaciones distintas de pérdida de datos, incluyendo algunas en las que la recuperación ya no es posible porque los intentos DIY del usuario han causado daños mayores. Aquí te brindamos algunos consejos para evitar la pérdida total de tu información y elevar las probabilidades de recuperación:

  • Instalar softwares DIY suele considerarse el procedimiento más rápido y económico, pero no es aconsejable. Conseguir uno acreditado es fácil, pero cuidado, este software no es recomendado en el mismo sistema en el que se ha producido la pérdida de datos, pues escribirá más datos en tu dispositivo y, como ya mencionamos, una sobre escritura podría destruir de inmediato archivos perdidos o eliminados.
  • Con solo colocar “Recuperar datos de disco duro” aparecen una serie de videoguías DIY con muchísimas vistas que afirman que pueden enseñarte a abrir correctamente tu disco duro y reparar problemas como los sonidos que suelen ser signos de fallos físicos. Abrir el disco duro fuera de una cámara limpia puede causar daños irreparables a tus datos.
  • Existe la errada idea de que congelar el disco lo devolverá a la vida, pero no es así. La razón es la siguiente: en cuanto sacas el disco duro del congelador, retoma la temperatura ambiente, y con ello, la condensación comienza a aparecer tanto dentro como fuera del dispositivo. Esta condensación va a aparecer también en la superficie del plato, donde tus datos se almacenan magnéticamente. Debido a que los cabezales de lectura/escritura del disco duro y las superficies del plato están a nanómetros de distancia y giran miles de veces por minuto, el agua causará graves daños en tu disco y en tus datos en cuanto intentes encenderlo de nuevo.